(Claudio Blanco)Tenemos muchas ofertas por Lisandro Martínez, pero la más firme e importante es la del Ajax de Holanda” le dijo Diego Lemme a La #CadenaVerdeamarilla del Gol en diálogo con Seba Purgart solo 10 minutos después de haber terminado el partido. Esa charla y ese título -¡Si se da, Defensa transfiere directamente a un poderoso de Europa!- define el momento actual del Halcón: tras haber logrado el subcampeonato y la clasifición a la Copa Libertadores, Defensa y Justicia amesetó su rendimiento. Logró muchísimo, lo máximo en su historia desde 1978 hasta hoy ¡Uf, demasiado! (póngale aquí emoticones de aplausos, si quiere) y eso en un equipo de extracción humilde y con objetivos grandes es un desgaste físico y emotivo gigante, el cual no es gratis. A Defensa le llegó el fin de la temporada en el momento justo, no serviría estirarla, aunque uno quiera y sea egoísta.

Defensa y Justicia fue despedido como se merece, con vítores. La gente respondió, a pesar del hastío de un gris atardecer. La dirigencia aportó lo suyo, poniendo la entrada a 200 mangos para que en éstos tiempos de malaria sea algo más fácil el acercarse. Todo estuvo bien. Pero en lo fútbolístico restó adrenalina: ya no era lo mismo pelear por un torneo armado a las patadas por obligación de FOX y TNT (gerontes de la comunicación y dueños del fútbol) que da como premio máximo un cupo en la Libertadores ¡algo que Defensa ya logró! Sí, es cierto, se juega por una estrella y por el dinero para las arcas del club, pero el torneo regular ya era pasado. Y el equipo perdió parte de su sorpresa, su peligrosidad y su “marca Defensa”, esa que ahora se deberá renovar con el armado del nuevo plantel y con o sin Sebastián Beccacece.

Y justamente Beccacece será motivo de una reunión y definición en algunas semanas. Si se va, sería al exterior; si se queda en el país sería en Defensa. Si se da ésto último, los dirigentes del Halcón deberán serle claros en los que se marcharán y quiénes serán las opciones para los reemplazos, algo en los que Defensa y Justicia tendrá -a diferencia de años anteriores- una billetera algo más abultada que le permitirá ciertas maniobras en el mercado de pases. Y un plus: quien llega a Defensa sigue su camino en alza, y lo saben tanto jugadores como directores técnicos.

Hay algo que debo decir, pero no recuerdo bien… ¡Ah, sí! Defensa perdió con Gimnasia de La Plata 2 a 0 y quedó eliminado de la Copa de la Superliga. Confieso que casi ya ni lo recuerdo.  A  ésta altura y con todo lo logrado, el haber caído ante el Lobo es una nimiedad y en la historia será apenas una manchita minúscula de tinta borroneada que desaparecerá en poco tiempo ¡Salud!

Hacer Comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada.