(Radio GBA / Seba Purgart) Lo planeado salió: despedir de éste petit torneo al Halcón con una multitud y festejar un triunfo; la dirigencia bajó el precio de las entradas, el público respondió en masa y el cuerpo técnico ¡Y los jugadores cumplieron con creces su objetivo ante “la víctima” llamada Racing Club! En un estadio Norberto Tomaghello colmado, Defensa y Justicia entonces volvió a ofrecer otra jornada histórica, esas que son difíciles de borrar de la memoria. Tomás Martínez y Fabián Bordagaray (de penal), marcaron los goles del triunfo por 2-1 ante Racing con gran transmisión del equipo periodístico de “La Cadena Verdeamarilla del Gol”, por Radio Empresaria 92.5 (www.radioempresaria.com.ar ) y Radio Gran Buenos Aires (radiogba.com.ar / www.rgba.com.ar).
El entrenador Ariel Holan pensó en una telaraña defensiva, apoyada en una inquebrantable línea de cinco en la última línea para maniatar a la Academia, invitado de honor a la fiesta del Halcón. Unas 12.000 personas empujaron al estadio a acercarse a su capacidad máxima, ayudado por la decisión dirigencial de bajar el precio de las entradas. Objetivo cumplido para celebrar la permanencia en Primera. El marco, vibrante, avallasador, envalentonó a los futbolistas para dar sus mejores versiones en cancha ante uno de los denominados grandes al que Defensa todavía no había podido derrotar. Los dos duelos anteriores también habían sido en Varela: 1-3, en 2014, en el debut en la máxima categoría; y empate 1-1, hace un año.
Eugenio Isnaldo estuvo en sintonía con el marco del Tomaghello. Vibrante, explosivo, pura fuerza para ir por la victoria. El 5-3-2 dejó al habitual extremo por izquierda como un segunda punta con libertad para moverse por cualquier banda. Desde la derecha, al minuto 22, sacó un centro forzado que Tomás Martínez no supo conectar de cabeza. Y a los 32´ lideró el contraataque desde la izquierda, trasladó en diagonal hacia el área y asistió al centro para dejar en soledad a Fabián Bordagaray, su compañero de ataque, quien desperdició la chance al tirarla afuera mientras Sebastián Saja se mostraba vencido.
Alexander Barboza lideró la última línea, con Lisandro Magallán y Tomás Cardona a sus costados. Damián Martínez y Rafael Delgado, por las bandas, cerraron con criterio los 30 metros finales de Defensa y que frustraron a Diego Milito, Lisandro López y Ricardo Noir, el tridente ofensivo de Racing. Incluso Marcos Acuña, el más movedizo de la visita, se vio contrariado ante el poco espacio para realizar su juego. Guido Rodríguez, eje hegemónico de la mitad de cancha en el primer tiempo, le sacó jugó a la soledad para tomar el balón, controlar y asistir a cualquiera de sus compañeros. Tomás Martínez y Hernán Fredes dejaron en evidencia, con algunas aceleraciones en diagonal en tres cuartos del campo rival, la superioridad del Halcón en un primer tiempo en el que la Academia no pateó al arco defendido por Gabriel Arias.
El complemento continuó con lo acontecido en la primera etapa. El ingreso del paraguayo Oscar Romero sumó de responsabilidades defensivas a Guido Rodríguez. Poco pareció afectarle al exquisito volante central. Defensa dio aviso de abrir el marcador a los 7 minutos gracias a un remate de Damián Martínez que Saja desactivó hacia el medio, pero el rebote estuvo a escasos centímetros de caer en Bordagaray. En la segunda jugada, el local recuperó el balón y llegó hasta Tomás Martínez, que intentó desde el borde del área y su remate se fue alto. La revancha, para el exmediocampista de River no tardaría en llegar.
Al minuto 11, Luciano Aued la jugó mal hacia el medio en ataque de Racing y originó la respuesta inmediata de Tomás Martínez, que no dudo para cruzar alto, fuerte, lejos y cruzado el balón para la incansable carrera de Isnaldo por derecha. El balón fue hacia al área para un Bordagaray que pudo entrar, por fin, en partido. La aguantó con criterio, tardó un segundo más para ver en posición a Tomás Martínez, listo y preparado en la medialuna del área para sacar un remate de primera, zurdazo sin pausa que se coló en el ángulo superior izquierda de Saja. El número 29 de Defensa fue autor intelectual de la acción, desde el propio campo del Halcón, y ejecutor del golazo para el 1-0.
El golpe dejó dormido a Racing y el equipo de Holan sacó provechó para asestar otra trompada en la quijada de su rival. Guido Rodríguez salió con prestancia desde el centro y dejó servido en bandeja para que Ciro Rius, que ingresó por Fredes, y Tomás Martínez disfruten de las oportunidades de una Academia tambaleante. La jugada quedó dentro del área, casi en el vértice, y en los pies del encargado del primer gol. Aued lo enganchó de atrás, y siguió. Grimi decidió patearla mientras estaba semi caído, y siguió. Nico Sánchez tiró el topetazo, pero su cuerpo ya no dio para más. El árbitro Saúl Laverni tuvo compasión y marcó penal, una revancha para Bordagaray ante tanto desencuentro con el gol. El remate del delantero, bajo y esquinado, fuerte y preciso, decretó el 2-0 y su noveno tanto en el campeonato, un grito que no salía de su boca tras siete fechas (derrota 2-1 ante Estudiantes, en La Plata).
La tranquilidad del resultado a favor y la vergüenza deportiva de Racing empujaron el juego más cerca del área de Arias. Romero, inteligente para ver espacios dónde parece no haberlos, rompió líneas con un pase frontal y alto que dejó mal parados, por primera vez, a los tres centrales. Gustavo Bou, recién ingresado, controló y tocó por encima del guardameta de Defensa al minuto 33. El descuento, injusto, inoportuno, puso tensión a un juego que parecía resuelto y desde entonces fue un examen de valentía y resistencia. Tomás Pochettino y Andrés Ríos ingresaron cerca del cierre con la misión de aguantar el asedio racinguista, pero sus actitudes, indolentes, casi terminan por arruinar la buena tarea general realizada en gran parte del encuentro. En último minuto de partido, una mano casual de Cardona a pasos de la línea de gol desató la exagerada protesta de Milito y compañía. Nada valió para quitarle la merecida victoria al Halcón ante un público que estalló con el silbatazo final.
La estadística ahora marca que Defensa y Justicia está en alza, con una racha de cuatro partidos sin perder producto de dos victorias consecutivas y que alimenta en buena medida el promedio para una próxima temporada, de formato de juego y cantidad de descenso indefinidos hasta el momento. Con eso, el objetivo inicial de Ariel Holan de alcanzar los 25 puntos está a sólo un punto de conseguirlo. Pero ahora el desafío es superador. Es que Racing entra en la bolsa de los denominados grandes que cayeron rendidos a los pies del Halcón. San Lorenzo ya lo hizo por Copa Argentina 2014, en casa de la Academia, y River salió machucado del Tomaghello en 2015 con un golazo de Walter Busse. El siguiente en la lista es el rival del próximo domingo, bajo un escenario ideal para cerrar a lo grande el campeonato y hacer caer a otro gigante: Boca, en La Bombonera.
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