(Radio GBA / DyN) Tras un errático operativo de búsqueda, los 3 prófugos que habían escapado antes de fin de año de la cárcel de General Alvear fueron recapturados por agentes de la comisaría de Cayastá, en la provincia de Santa Fe. El primero en ser apresado fue Martín Lanatta luego de que la camioneta en que se desplazaban los tres prófugos volcara en la localidad santafesina de Cayastá, a la vera de la ruta provincial 62, que une esa localidad con Cayastacito, en el departamento de Godoy. Pasado el mediodía, su hermano, Cristian, fue detenido por fuerzas federales en el paraje Las Cuatro Bocas, cerca de la misma localidad de Cayastá, luego de ser reconocido en un pantano. Poco después cayó Víctor Schillaci.
Según confirmaron fuentes policiales a la agencia DyN, las tres detenciones, que se efectuaron en operativos separados, se concretaron en los alrededores de Cayastá, un pueblo ubicado a unos 80 kilómetros de la capital de Santa Fe.
Martín Lanatta, el primero de los detenidos, fue encontrado con politraumatismos leves tras volcar la camioneta Volkswagen Amarok que había sido robada durante la madrugada. Su hermano Cristian fue detenido en unos arrozales del paraje Cuatro Bocas, entre las rutas provinciales 35 y 42, a pocos kilómetros de Cayastá. Por su parte, Víctor Schillaci también fue apresado en cercanías de la zona donde se produjeron las otras dos detenciones y, según fuentes cercanas a la investigación, cuando fue interceptado por la policía protagonizó un tiroteo que no dejó heridos.
Fuentes policiales informaron a Télam que los delincuentes mantuvieron cautivo por dos días a un ingeniero agrónomo que habían secuestrado el jueves en la localidad de San Carlos. En ese lapso consiguieron plotear la camioneta con las características de la de Gendarmería y finalmente esta madrugada lo dejaron maniatado y continuaron su escape por caminos secundarios hacia el norte de la provincia.
Luego de volcar, llegaron a una casa en un campo, secuestraron otra camioneta y se volvieron a quedar empantanados. El menor de los hermanos sufrió lesiones tras el vuelco, y aproximadamente a las 10.30 se acercó hacia una propiedad para pedir agua, y allí fue apresado por personal de la Policía de Santa Fe.
Uno de los evadidos fue mordido por un perro, según describió el puestero que les dio agua y cuando se fueron aprovechó para llamar a la Policía. Ninguno de los tres condenados que fueron recapturados después de estar 13 días prófugos presentaba heridas graves al momento de las detenciones
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